miércoles, 24 de noviembre de 2010

las ausencias.

cuando uno vive solo, se acostumbra a estar sin gente por mucho tiempo. por dias, semanas, y a veces meses, te acostumbras a llegar a casa y tener un silencio muy propio y muy tipico de esa soledad nocturna. y hasta te llega a gustar.

el problema viene cuando ese silencio ya no es por la costumbre de estar solo, sino por la ausencia que deja alguien mas. y ese silencio se vuelve un estruendo, y te agobia, te incomoda, y no te deja dormir.

hace varios dias que mi mapache esta lejos por cosas, cosas y cosas. y yo lo extraño. y aunque debo confesar que el (mi) silencio me gusta y lo disfruto, este silencio ya es mas largo de lo normal y lo estoy empezando a odiar. este silencio se ha convertido en una larga serie de ausencias, y a esas las hemos odiado desde siempre.

[ven rapido que te extraño. ya no quiero dormir mas noches si no estas. ya no quiero mas ausencias.]

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